El ñame es un tubérculo comestible originario de Asia, África y las regiones tropicales de América. Se caracteriza por su piel gruesa, que varía de marrón claro a oscuro, y su pulpa interior que puede ser blanca, amarilla o púrpura, dependiendo de la variedad. Su textura es densa y su sabor suave, ligeramente dulce cuando se cocina.

Desde el punto de vista nutricional, el ñame es una excelente fuente de carbohidratos complejos, que proporcionan energía sostenida. También es rico en vitamina C, que apoya el sistema inmunológico y la salud de la piel. Además, contiene vitaminas del grupo B como la B6, que son esenciales para la función cerebral y el metabolismo de las proteínas. En 100 gramos de ñame cocido, hay aproximadamente 118 calorías, 28 gramos de carbohidratos y 4 gramos de fibra.

El ñame es un alimento básico en muchas culturas y se consume de diversas formas: hervido, frito, en puré o como ingrediente en sopas y guisos. La temporada de cosecha del ñame varía dependiendo de la región, pero generalmente se encuentra disponible durante todo el año, especialmente en zonas tropicales.