La croqueta es una preparación gastronómica que consiste en una pequeña bolita o cilindro relleno, generalmente de bechamel (una salsa espesa a base de leche, harina y mantequilla), y que puede contener diversos ingredientes como pollo, jamón, pescado o espinacas, entre otros. Una vez rellena, la croqueta se empaniza y se fríe, lo que le da una textura crujiente por fuera y suave por dentro. Es un plato muy popular en muchas cocinas del mundo, especialmente en España, donde se considera un aperitivo o tapa tradicional.

Desde el punto de vista nutricional, las croquetas son una fuente de proteínas, principalmente cuando se rellenan con carne o pescado. La bechamel aporta carbohidratos debido a la harina, y las croquetas suelen tener un contenido significativo de grasa, ya que se fríen en aceite. Dependiendo del relleno, también pueden aportar vitaminas y minerales, como vitamina A (en caso de vegetales como las espinacas) o hierro (en caso de carne o pescado).

En cuanto a la temporada de consumo, las croquetas se pueden disfrutar durante todo el año. Son populares en celebraciones, fiestas y como tapas en restaurantes, pero también se sirven como parte de comidas familiares en diversas épocas del año.